jueves, 25 de septiembre de 2008

Hoy y Mañana

No sé...me puse a escribir algo que no pretendía (ni pretende) ser poesía. Por ahí puede sonar medio cursi, ¡qué sé yo!

A veces, todo está mal

Las sombras me acechan,
las nubes me invaden,
el alma se seca al calor de la angustia
el corazón se anuda, se dobla y así queda.

Y así me encuentro:

Enredado en confusión
hundido en mis miedos
anhelante de oír el susurro de Dios
y avasallado por su silencio.
Huye de mí toda fuerza,
me abandona el aliento
la burla muestra su horrible cara
el fracaso me sitia con todo su encierro.

Pero no durará siempre

No siempre reirán los que desean mi mal
No siempre hablarán quienes debieran callar
No siempre las sombras me rodearán
No siempre las nubes de mí se reirán
Volverá a mi alma su aliento
Regresará mi fuerza y será como viento
Mis temores huirán a regiones oscuras
Y aún mi dolor y fracaso se irán a su tumba.

Porque llegará el día

cuando Dios hablará
cuando extenderá a mí su mano
cuando conmigo reirá
cuando lo enfermo hará sano
Entretanto, me aferra en sus brazos,
por valle de sombra conduce mis pasos.
Digno no soy de estar en su gloria
mas de su amor en la cruz no pierde memoria.

Señor, no tardes tu mano.
Abre tus labios, dame tu amparo.
Que los que me buscan, no puedan hallarme,
que de hablar de tu amor no puedan callarme.
Sé que estás, sé que vigilas
Hoy no te veo, mas lo haré algún día
Entretanto, mi Padre, sostenme en tu seno
y que mis amados de tu paz sean llenos.

Ya no lucho...
Ya no corro...
Ya no cuestiono...

Desde donde estoy...
o desde el fondo del abismo...
Sólo espero que me levantes...
que me impulses hacia arriba.

Mx

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